VITO RUSSO Y EL
ACTIVISMO LGTBI TRAS STONEWALL
25 jun 2019
‘Vito’, de Jeffrey Schwarz
Documental sobre Vito Russo
93 ‘, Estados Unidos |
Automat Pictures, Making it Big, 2011
Filmin
El próximo viernes 28 de junio la comunidad internacional
LGTBI encara una relevantísima efeméride, en tanto que en el presente 2019 se
conmemora el cincuenta aniversario de los ‘Disturbios
de Stonewall‘, una inopinada en insólita manifestación en protesta contra
la redada que el Escuadrón de Moral Pública del Departamento de Policía de la
Ciudad de Nueva York había procurado, durante aquella incipiente madrugada, en
el ya eximio Stonewall Inn.
Disturbios de Stonewall
Un popular bar ubicado en Christopher Street, del
Greenwich Village, propiedad de los Genovese –una de las cinco familias
mafiosas del crimen organizado neoyorkino–, frecuentado por transexuales, travestis
y transgénero, quienes se negaron a entregar su documentación y someterse a los
dictados de la brigada, lo que provocó una escalada de confrontaciones con los
agentes de policía que acabaría concitando a cientos de gais, lesbianas y
transexuales a las puertas del pub.
Conducidos por un espontáneo fervor, durante la
tarde-noche siguiente miles de personas se concentraron frente al local y
ocuparon las calles adyacentes, con la consecuente presencia de cientos de
policías antidisturbios y el desarrollo de enfrentamientos y persecuciones. Un
acontecimiento inédito y capital del que era testigo una de las figuras
determinantes, a la postre, del movimiento de liberación LGTB
norteamericano: Vito Russo (Nueva York, 1946-1990).
El Celuloide Oculto
Vito Russo, “historiador de películas, crítico y defensor
de los derechos de los homosexuales” –tal y como fue perfilado por The New York
Times en su obituario del 9 de noviembre de 1990–, ha pasado a la posteridad
internacional LGTBI gracias a su publicación ‘El Celuloide Oculto’ (‘The
Celluloid Closet’, 1981), un proyecto literario-cinematográfico iniciado a
comienzos de los años setenta por el autor –ampliado y revisado durante el
resto de la década ulterior– que analizaba la presencia y el tratamiento de los
personajes LGTB en la historia del cine producido en Hollywood, con el que Vito
se prodigó por todo el país impartiendo conferencias durante una década,
granjeándose una insospechada y bienvenida popularidad, éxito de ventas
incluido.
De este modo, en ‘The Celluloid Closet’ se refieren y
analizan títulos como ‘La novia de Frankenstein’ (James Whale, 1935), ‘Gilda’
(Charles Vidor, 1946), ‘Río Rojo’ (1948), ‘Los caballeros las prefieren rubias’
(Howard Hawks, 1953), ‘Johnny Guitar’ (Nicholas Ray, 1954), ‘Rebelde sin causa’
(Nicholas Ray, 1955), ‘La gata sobre el tejado de zinc’ (Richard Brooks, 1958),
‘Ben-Hur’ (William Wyler, 1959), ‘Espartaco’ (Stanley Kubrick, 1960), ‘Cowboy
de medianoche’ (John Schlesinger, 1969), ‘Los chicos de la banda’ (William
Friedkin, 1970), ‘Cabaret’ (Bob Fosse, 1972), ‘El expreso de medianoche’ (Alan
Parker, 1978) ‘A la caza’ (William Friedkin,1980), entre otros filmes.
Películas en su mayoría sometidas al denominado ‘Código
Hays’ –redactado por William H. Hays, uno de los principales adalides del
Partido Republicano durante los años treinta del pasado siglo–, implementado
por la Motion Picture Association of America (MPAA) entre 1934 y 1967 y que,
mediante su código de producción, reglaba qué tipo de contenidos podían verse
en pantalla.
Cabe mencionar al respecto que, en 1995, el oscarizado
cineasta y productor Rob P. Epstein –doblemente galardonado con la estatuilla
al mejor largometraje documental por ‘Los tiempos de Harvey Milk’ (1984) y ‘Common
Threads: Stories From The Quilt’ (1989)– adaptó y dirigió, junto a Jeffrey
Friedman, el documental homónimo ‘The Celluloid Closet’ –considerado por la
crítica más laxo y con menor carga política que la obra de Russo–, ampliando la
nómina de cintas incluidas por Vito, en tanto que producidas durante el lustro
posterior a su fallecimiento.
En él se incluyen desde ‘El silencio de los corderos’
(Jonathan Demme, 1991) o ‘Las aventuras de Priscilla, reina del desierto’
(Stephan Elliott, 1994), por citar un par de célebres ejemplos, hasta ‘Sólo
ellas… Los chicos a un lado’ (Herbert Ross, 1995), completando así un siglo de
cine, cuya investigación incoaban Vito y Epstein con el brevísimo cortometraje
de diecisiete segundos ‘The Dickson Experimental Sound Film’ (William Dickson,
1895).
Test de Vito
Igualmente, en base a los criterios manejados en la
publicación e inspirándose, a la par, en el ‘Test de
Bechdel‘ –incluido por la ilustradora estadounidense Alison Bechdel en su
cómic ‘Unas lesbianas de cuidado’ (1985), en el que se evalúan las producciones
cinematográficas desde el punto de vista feminista–, la Alianza Gay Lésbica
Contra la Difamación, o GLAAD (Gay and Lesbian Alliance Against Defamation)
–de la que Vito fue uno de sus cofundadores, en 1985, siendo gestada “como
reacción directa a la cobertura inexacta, difamatoria y sensacionalista de la
epidemia del sida” publicada desde el New York Post–, postula con radical
vigencia el ‘Test de Vito‘ (en honor a la figura que nos ocupa).
Un test formulado en base a tres puntos fundamentales
para que la representación del colectivo LGTBI sea plausible (y cuyos
resultados anuales suelen arrojar, según los análisis publicados, guarismos
inferiores al 15 % de filmes que superen el estudio):
1.
La película o la serie
debe incluir, como mínimo, un personaje LGTBI.
2. Este personaje debe
tener una importancia más allá de su identidad u orientación sexual, es decir,
su diferenciación con los demás personajes no debe basarse en su pertenencia al
colectivo LGTBI.
3. El personaje debe tener
relevancia en la historia.
‘Vito’, la deriva biográfica de Russo
Sin embargo, más allá de la celebridad periférica
proveniente del mencionado largometraje y del bautismo honorífico indicado,
Vito Russo permanece, inexorablemente, en los sótanos de la memoria de la
comunidad y del movimiento LGTBI norteamericano (no digamos ya por estos predios).
Por ello uno celebra reencontrarse y rescatar del lacónico olvido a Vito Russo
gracias al documental ‘Vito‘, del director neoyorkino Jeffrey Schwarz, escasamente
difundido desde su estreno en 2011 y que la plataforma de video bajo demanda
Filmin atesora, como un aljófar, en su catálogo.
A través del testimonio de familiares, amigos, compañeros
y camaradas coetáneos, ‘Vito’ reconstruye la deriva biográfica de Russo y cobra
morfología extraordinaria mediante la inclusión de un valiosísimo material
audiovisual –en algunos casos inédito– que revela los principales hitos de su
activismo político LGTB desde principios de los setenta hasta su fallecimiento,
a causa del sida, en otoño de 1990.
Miembro incipiente de la Alianza de Activistas Gay (Gay
Activists Alliance, GAA); figura preeminente en la organización y
parlamentos de los Gay Pride de la costa este norteamericana; productor,
guionista y presentador, desde 1983, de la serie de programas para la comunidad
gay ‘Our time‘, emitido por la televisión pública WNYC-TV –cuyos
trece episodios se encuentran íntegros y disponibles en Youtube–.
Vito Russo fue un luchador infatigable, a través de la
Alianza Gay Lésbica Contra la Difamación, frente a los estigmas sociales
provenientes de las consecuencias visibles e intangibles del VIH y del
vergonzante inmovilismo al respecto de la administración Reagan.
Padeció la muerte de su última pareja a causa del sida
–cuyo caso fue incluido en el documental ‘Common
Threads: Stories From The Quilt‘, dirigido en 1989 por Rob Epstein– y narró
frente a las cámaras la deriva de su propia enfermedad, sin un ápice de
dubitación y sustentado por el aplomo de una existencia ética y políticamente
intachable.
Consejo Editorial de MAKMA
Comisario de arte, editor, periodista
y gestor cultural.
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